ComBoca cumple 10 años

La marca ComBoca cumple una década. ¡Diez años! ¡Qué rápido pasa el tiempo! Aunque como empresa nos constituimos hace casi cuatro años, desde 2015 llevamos dando guerra. Como fundadora, estoy muy orgullosa de compartir un poco de nuestra historia y reflexionar sobre cómo este proyecto, que empezó casi por casualidad, ha crecido hasta convertirse en algo tan especial.

Soy periodista y durante más de diez años trabajé en medios de comunicación. La radio y la prensa local fueron mi hogar profesional en aquellos primeros años, y ya de vuelta en Madrid, pasé cuatro años en una revista tecnológica antes de entrar en el mundo de las agencias de comunicación. Este fue un periodo enriquecedor que me permitió descubrir un sector hasta entonces desconocido para mí: el ecosistema emprendedor.

A través de uno de mis clientes me acerqué al mundo de las startups, que en España vivían un momento de efervescencia total. Trabajar con ellas me dio la oportunidad de involucrarme en proyectos apasionantes, llenos de ideas frescas, energía y ganas de cambiar el mundo. Fue como reencontrarme con el periodismo, pero en una versión renovada, vibrante y cargada de la emoción que caracteriza a los emprendedores.

Cuando mis circunstancias profesionales cambiaron, decidí emprender por mi cuenta y dedicarme a la comunicación para startups, ofreciendo mis servicios a aquellas que necesitaban visibilidad en el mercado, pero no podían permitirse las tarifas de las grandes agencias. Así nació ComBoca.

Mi primer cliente, Marta Capellán, me dio un voto de confianza que nunca olvidaré. Su empresa, MC Coaching, fue el primer paso en mi camino como freelance. En esos inicios, con pocos recursos, me uní a un club de networking que me abrió las puertas a nuevos clientes, principalmente empresas pequeñas que, como yo, estaban dando sus primeros pasos. La suerte también jugó su papel: Almudena Alameda, amiga y excompañera de VNU, me presentó a Clara Armand-Delille, alguien muy bien conectada con el ecosistema emprendedor europeo y clave en nuestro posicionamiento como agencia que apoya a startups extranjeras que necesitan un partner de comunicación en España.

Uno de esos proyectos me llevó a conectar con Sebas Fernández-Medrano, entonces en el venture capital Samaipata. Gracias a su confianza, no solo trabajé en ese primer encargo, sino que también fui recomendada a otras startups como Ontruck y Lingokids. Sin esas primeras oportunidades y la

confianza de personas como Sebas, Iñigo Juantegui o Cristóbal Viedma, ComBoca no habría tenido el impulso inicial que nos trajo hasta aquí.

Con el paso del tiempo, ComBoca dejó de ser un proyecto individual para convertirse en un proyecto colaborativo, con un equipo que comparte visión, compromiso y pasión por lo que hacemos. Este equipo es, sin duda, lo que más me enorgullece, porque cada miembro aporta algo único a nuestra agencia.

Pablo, mi socio y compañero de vida, es uno de los grandes pilares de ComBoca. Como director de Sostenibilidad, su experiencia y formación en este campo han aportado una dimensión con propósito que define gran parte de lo que hacemos.

Margara, una ‘conseguidora’ nata, tiene un talento excepcional para las relaciones públicas. Además, vivimos cerca, lo que nos permite compartir momentos que hacen el trabajo más ameno y divertido.

Esther y Gemma son colaboradoras esenciales que complementan perfectamente al equipo. Esther tiene una amplia experiencia gestionando cuentas de empresas nacionales e internacionales y aporta rigor y profesionalidad en todo lo que hace. Gemma, nuestra “conexión catalana”, combina su conocimiento del mercado local con su propio proyecto, Dosde2, y su apoyo estratégico ha sido clave en muchos momentos.

María Rodríguez merece una mención especial en este post. Durante seis años y medio fue un pilar esencial de ComBoca, dejando una huella imborrable con su estrategia, creatividad y compromiso. Recientemente ha comenzado una nueva etapa como responsable de Comunicación en SEPLA, pero siempre será parte de nuestra familia. Le deseamos todo el éxito del mundo en este nuevo camino.

Para celebrar esta década de trabajo, hemos renovado nuestra imagen corporativa y lanzado una nueva web. Este cambio simboliza nuestra evolución, pero también mantiene intacta nuestra esencia. Queremos que quienes nos conozcan sientan que aquí encontrarán lo que necesitan para ganar visibilidad, credibilidad y confianza en el mercado.

En todo este tiempo he aprendido que, en la comunicación, como en la vida, lo más importante son las personas. Clientes, equipo, colaboradores… todos han sido piezas clave para que ComBoca sea lo que es hoy.

Gracias a todos los que han confiado en nosotros, a los que formáis y habéis formado parte de nuestra historia. No sé qué traerán los próximos años, pero estoy lista para afrontarlos con la misma pasión que me llevó a emprender.

¡Por muchos años más